Yo creo que después de la muerte, hay vida. Sí, soy creyente y supongo será mejor que esta. Pero no voy a escribir sobre de este tema.
Yo sé que después de la muerte, de nuestra muerte, podemos ayudar a nuestros semejantes que están enfermos esperando un transplante de su órgano que no le funciona bien. La donación de órganos es una buenísima solución.
Me estoy planteando seriamente hacerme donante de órganos porque ya no me servirán para nada cuando “esté en el otro barrio” y será otra forma dar vida a mucha gente que necesitarán un transplante.
Me he informado bien por Internet, solo no pueden donar órganos las personas con enfermedades terminales.
Acabando este articulo, pensando seriamente que bonito es esta acción para ayudar y solidarizarse con los demás humanos. Es una forma de afirmar detrás de una muerte, hay vida.
Carlos Grasa
4 comentarios:
Reflexión porfunda y útil. Estoy totalmente de acuerdo contigo en las dos cosas Carlos.
besicos
Esther
Yo sólo afirmo amiga, que después de nuestra muerte podemos dar vida. La segunda ??? No afirmo nada mas.
Csrlos
Socorroooooooooooo!!!!!!!!
Carlos necesito un transplante de pelo.
¡¡¡Hazte donante por favor!!!
jajajajajaja
Pamela, depliarte ¡Guarra!
Con cariño, Carlos
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